La Tumba Tracia de Mezek fue descubierta en enero de 1931, por casualidad, en el túmulo de Maltepe a 1 km al este del pueblo de Mezek. Fue estudiada en el verano del mismo año por el Prof. Dr. Bogdan Filov y el Dr. Ivan Velkov. La tumba data de mediados del s. IV a. de C. La tumba tiene una cúpula grande en forma de una cesta, así como dos pré cámaras. Hasta las cámaras se accede a través de un pasillo largo (dromos), en el que se encuentra una expoxsición holográfica permanente que representa los objetos encontrados en la tumba, mediante hologramas de reflejos por espejo.