En el siglo XV se construyó la primera iglesia, sobre el empalzamiento actual del monasterio de Celic-Dere, por unos monjes de Transilvania y Besarabia volviendo de nuevo de la Montaña de Athos. A raíz del incendio en esta iglesia, los monjes obtuvieron en el s. XIX el visto bueno del Sultán Abdul-Medgid (Dobrogea estaba en aquel entonces bajo dominio otomano) para la construcción de la actual iglesia. Desde 1901 el monasterio se haita por religiosas llegadas de Besarabia, el grupo de monjes que había construido el monasterio lo abandonó para construir el monasterio de Saon, a varios kilómetros de allí.
El monasterio y su entorno son un lugar perfecto para sentir la paz o incluso practicar la meditación. Construida en una zona de colinas, la iglesia del monasterio está ubicada en la cima del complejo, y se accede a ella por un camino en el medio de los edificios con una decoración muy bien mantenida.
El monasterio de Celic-Dere es conocido por sus frescos murales, realizados a principios del siglo XX por Gheorghe Eftimiu, pero sobre todo por sus iconos, entre los cuales el más famoso es '' el icono que se limpia solo ''.