La Mezquita Esmahan Sultán, construida en 1575 es el lugar de culto musulmán más antiguo de Rumania. Es también el principal monumento de la ciudad.
Esta mezquita acoge todavía los pocos fieles musulmanes de la ciudad. Dejada al abandono durante la época comunista, esta mezquita resucita desde 1989, gracias a las restauraciones y las obras de reformas, en parte financiadas por el Gobierno turco.